Acabo de llegar de la charla de Gary. Bastante interesante debo decir. Imagino sus años de juventud cuando los nerds consumían tóxicos y leían Whitman. Ahora consumen toxicos y entran a los tiros en un chopping.
Lo que sostiene Gary es que la ilegalidad de las drogas, además de implicar un costo social bastante grande, está directamente relacionada con el crimen. La declaración de “esto no” no permite la creación de un espacio físico donde se producen intercambios voluntarios y que por tanto, tiene todo tipo de consecuencias. Más allá de la violación de los teoremas de bienestar, el punto que sostenía Gary era otro.
Para él, el crimen está concentrado del lado de la oferta. Esto parece bastante acertado al remitir sobre la estadísticas de criminalidad de USA, donde las miniwars entre proyectos de gánster (en criollo, patotas) se dan en Chicago, LA, California, NYC, etc. Por lo tanto, lo que el sugiere es sencillamente legalizar las drogas con el único fin de tener oferentes legales: Que paguen impuestos, que estén registrados; en fin, que sean una corporación. Entonces, no es la demanda, sino la oferta. Volvamos sobre lo mismo, el no afirma sobre que si la gente consumirá o no mas falopa, a él lo que le preocupa es el crimen detrás de la droga.
¿Sera aplicable esto para un país como el nos? Creo que no. Si tenemos que hablar del crimen relacionado con la droga, estimo que viene más por el lado de la demanda. Esto quiere decir que legalizando a lo Gary, el crimen aquí se reduciría mas por una cuestión de aumento del excedente del consumidor. Pensémoslo así: el falopa jodido necesita el toxico porque el cuerpo se lo pide, difícilmente se pueda abstener o reducir su consumo si ve un precio alto (una demanda bastante inelástica). Ergo, intentara por todos los medios aumentar su restricción para que juntar la plata necesaria para conseguir el toxico. Al legalizar y reducir los costos (por un momento, pensemos en un mercado competitivo de proveedores de tóxicos) el nuevo precio de equilibrio será menor para una demanda dada (EI+ES). Y este es el carma de los países pobres. Gary no se preocupa por la demanda porque el salario real medido en términos de la bolsita compra el toxico; en el subdesarrollo no. Por otro lado, nuestra oferta, o sea nuestros tranzas, todavía no enfrentan problemas de competencia o al menos no es tan grave.
Esto último quedo clarísimo en su exposición. El sugería que una vez legalizado el market, se podría poner un impuesto para descentivar el consumo. En primer lugar, la demanda por drogas duras es lo más inelástico que hay en la tierra: se reducirá poco el consumo. Pero inclusive así, no sugiere que aquellos que no llegan a comprar toxico (por este nuevo impuesto que subió el precio) puedan recurrir al crimen. Una vez más, Gary mira la oferta y eso está bien para USA, no para NOS. Tal vez por eso nosotros tenemos PIZZA, FASO Y BIRRA y ellos el PADRINO.
2 comentarios:
Che Alex, muy bueno. Lo que decis es tema para paper.
Si pero estoy perdido en un sueño Borgeano: Muy vago como para escribir.
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