X: Pero Alex, estás diciendo imposibles, sin estas probabilidades el modelo pierde sustento.
Alex: No busquemos sustento donde no lo hay. Queremos ver como se toman decisiones bajo incertidumbre, pero déjame que te diga, mi amigo, el futuro es impredecible. Por más trivial que te suene, al futuro no nos acercamos ni con una probabilidad.
X: Pero fíjate que eso ya lo arreglamos. Ahora dejamos fluctuar al “alpha” entre un rango de valores en vez de fijarlo en un valor preciso, como era la manera clásica.
Alex: Pero lo único que están haciendo ahí es decir “bueno, en vez de que tome un valor discreto, veamos cómo cambia el resultado al convertir a la probabilidad en un continuo dentro de un espacio finito”. Nada más, no hay sentido en eso.
X: ¿Entonces?
Alex: No hay entonces, pues no solo la probabilidad per se es un problema, sino que como dijo el viejo maestro Foucault “Cada género discursivo genera su verdad, cada momento histórico escribe sus propiedades verdades”. Nuestro individuo que máxima en t en relación a escenarios probables en t+1, no tendrá nada que ver con el individuo en t+1, que es el que ahora recibe lo que máximo en un periodo anterior con probabilidades esotéricas.
X: ¿Entonces qué hacemos?
Alex: Dejemos todo acá y vamos a ver al Chelsea, tal vez después, se nos ocurra algo un poco original.