miércoles, 13 de agosto de 2008

El mapa es el territorio.

Dos sucesos dicotómicos han llamado la atención de quien le escribe:
1) El eterno retorno de los medios de comunicacion Argentinos con el siempre intrigante tema de la inseguridad. Desconozco los motivos o causas que llevan a traer el mismo tema a colación una y otra vez (o mejor nos podríamos preguntar que ha motivado a dejar de hablar de ello en algún momento), pero ciertamente es falso que la criminalidad, hoy por hoy, sigue un ciclo de altos y bajos. Se muere gente por la inseguridad desde hace años sin interrupciones. That's all.
2) Sobre 1) es difícil decir algo relativo a las soluciones (prueba de lo cual es una vecina de un country, vía Telefe Noticias, diciendo"¿Para que pago impuestos? Gasto un montón de plata y me pasa esto...que alguien haga algo". Por supuesto que no intentamos asociar su imagen como elemento representante de la clase media Argentina (la cual seria verderamente útil, al menos para los teóricos en ciencias políticas, pues explicaría inmediatamente porque este pais siempre careció de un proyecto en serio), pero entendemos su demanda basada en que la riqueza se debe traducir en niveles de seguridad.
3) Como nos engañaron los Chinos con una ceremonia que realmente no fue así. Claro que para darnos cuenta del engaño tuvo que venir alguien a avisarnos. Si es cierto, puede que inconscientemente yo este detestando los juegos (para los Argentinos, los juegos olimpicos es como ir a una fiesta a la que nunca nos deberían haber invitado: las minas no te dan bola, alguien ya se tomó todo el alcohol, y el sector drogas esta en el tercer piso con acceso restringido a modelos y proxenetas).
En estos tiempos donde se mama información y desarrollo tecnológico, tal vez, y solo tal vez, la cuestión metafisica apariencia-realidad deba ser cuidadosamente reelaborada en torno al pragmatismo inmediato. Es apasionante entender si la manzana que me como (esta manzana) proviene de la esencia manzana que reside en el logos divino (LA manzana), pero es mas útil entender cuanta fruta nos venden aquellos encargados de diagramar la realidad.
¿Que estamos queriendo decir? Aquí hecho película; Aquí hecho libro.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que en estos juegos mas que nunca vale la comparacion con el mundial 78, un extraño paralelismo entre la presentacion con miles de personas coordinadas (claro sumemos años de desarrollo tecnologico y miles de millones de dolares), pero la misma clara idea de fondo, demostrar que china no es mas el "made in china" sino que es potencia. Me sorprendio que toda la parafernalia haya engañado a tanta gente, pseudo progres que gozan de nuestra simpatia como Alejandro Fabbri, y algunos un poco mas creibles como Bonadeo, sin embargo, a 1 semana y pico del comienzo ya saltan las evidentes fallas: Los fuegos artificiales que fueron virtuales, la niña cantora que fue reemplazada porque era fea (que los chinos son todos iguales??) y sobre todo la evidente explotacion de atletas. Siempre me gustaron los juegos olimpicos, desde una mononucleosis que me obligo a verlos enteros y este año me llamo la atencion la arremetida china en deportes donde nunca se destacaron, y la juventud de los mismos, ganador de medalla en levantamiento de pesas de solo 17 años (a que edad habra empezado a entrenar?) y la evidente trampa de ayer a la noche cuando china gana gimansia en equipos con una competidora que para cualquier ojo humano no pasa de los 12 años, pero segun los papeles tiene 16. Muy graciosos leer los labios de las segundonas yanquis diciendo "what the fuck, she's not even 12"...
Todavia espero alguna medalla de oro argenta, y claro no dejemos que los derechos humanos arruinen esta fiesta del deporte

Sir Alex De Large dijo...

Coincido with you. Hay todavia esa tendencia por parte de los despotismo modernos de querer mostrar al mundo su potencia via un evento deportivo: la Alemania Nazi y sus olimpiadas, bajo la atenta mirada del fuhrer en un gesto de sueño de super atleta. Los Chinos seguro nos quieren mostrar algo, lo que son, lo grande y la amenaza. Deseosos en aceptar la Coca Cola pero reacios a diagramar una jornada laboral de horas diarias. Eso es todo, aunque lo notable es como se utilizan los medios para crear realidades virtuales (Si cabe la expresion).
By the way, nos tomaremos unas copas antes de mi partida.

Salute.